Buenos Aires, 29/4/2013
Abro la heladera, medio limon, un caldo en su envase metalizado, sobrecitos de mayonesa, ketchup y salsa golf , una botella diminuta de esencia de vainilla por la mitad.
Abro la heladera, medio limon, un caldo en su envase metalizado, sobrecitos de mayonesa, ketchup y salsa golf , una botella diminuta de esencia de vainilla por la mitad.
Desde
el living llega el sonido de un mantra, Gloria medita, el ronroneo gutural que emite y el olor a incienso invaden toda la casa. Mia quiere un
vaso de leche y me mira parado frente a la heladera abierta , estira su
brazo ofreciendome un vaso de plastico de Hello Kitty rosa.
-
Leche, me pide con arrogancia pero con una sonrisa.
Gloria
respira hondo y emite sonidos que detesto, la ausencia de alimentos me irrita. El fuego del odio se despierta, soy todas las patadas que quiero darle a la heladera hasta sacarla de su
trance.
-
No hay.
Las velas junto al Buda estan encendidas, falta leche.
La vida sana de los que practican ¨la vida sana¨. Meditan y se niegan a la realidad, asumiendo un universo tan fantastico como el
de los testigos de Jehova o el de esos creyentes que se juntan en viejoscines y
teatros devenidos en templos a comprar una fe que chorrea grasa.
Incienso y Dioses violetas, piedras, flores, amuletos. El milagro al alcance de la mano.
Hacer
yoga a veces parece una postura de moda, un lugar de pertenencia, esa idiota expresion
de ser alguien que hace yoga, y vive en un mundo donde todos deberian hacerlo, incluso la gente que caga en pozos en el piso y para beber el agua que sale casi contaminada desde una
canilla rota hace una cola de media hora. Dos bidones maximo por persona,
pidanle a esa adolescente que en una
tarde de verano, muerta de sed y con el culo sucio haga el saludo al sol, la
pose de la vaca y el gato.
Mierda.
Hay
un muchacho que lleva perros a la plaza donde suelo ir a sentarme por las
tardes, salgo de la casa un rato porque no soporto el poco oxigeno que hay, no es que la casa sea chica, la decepcion es grande, es azul.
Todas las tardes llevo a Pulgoso a dar una vuelta, me
siento en un banco y pienso en Amsterdam.
El
muchacho de los perros hace yoga, 4 horas diarias con intervalos, tiene la cara
deformada por el uso de drogas alucinogenas, un habito que dejo gracias a esa
practica espiritual como el dice, eshhhhpiritual, pronuncia con sus
dientes carcomidos por la cocaina. El nuevo camino:
-
Y la profe tiene un orto! Estoy enamorado!
Le
digo que el vicio de fumar me domina, los culos se caen, los cigarrillos no
cambian. Fumar es cosa del diablo, y los culos son para cagar, agrego, mientras saco un Philip Morris del paquete semivacio y lo enciendo.
Un
manto negro se pone a ladrar, el se pone de pie y le da un cachetazo con la mano
abierta, el perro emite un llanto, uno solo, el muchacho de los perros tiene la
cara deforme desencajada de ira. Me guinia un ojo, y dice:
-
Cuando tenes muchos perros, hay que saber quien es quien, con los dias
te vas dando cuenta quien es el poronga de la jauria, cuando me doy cuenta
quien es el que se hace el vivo, paf! Le meto un toque y todos los demas se
quedan, me miran, como diciendo: upa! Este le mete miedo a nuestro lider, y ahi
me transformo en el alfa de la manada, el lider. Hay que tener actitud y huevos
para llevar este laburo adelante. Las minas paseadoras de perros estan todas
locas, no saben que carajo les gusta, o son medio degeneradas o no saben si les
gusta la pija o la concha. ¿Entendes? Son todas medio chaboncito, pero van
arregladitas y te relojean el bulto. Son raras.
Me
acerco sigilosamente y en puntas de pie hasta donde Gloria esta sentada, tiene
los ojos cerrados, Mia me observa levantando una ceja y poniendo la cabeza de
costado como hacen los perros. Por dios , que nena mas linda, sabe lo que voy a
hacer, la miro y le indico con un gesto que no haga ruido. Me siento frente a
Gloria y simulo que hago un grito histerico y mudo frente a ella, como si
fuese un gorila gritando de dolor porque un cazador mato a su cria, mientras se da golpes en el pecho.
Mia
se rie y Gloria abre los ojos.
Un
ataque de ira la levanta del trance de un salto, patea la silla, le pega con dos dedos a la
barra espaciadora de la computadora y detiene el mantra que venia repitiendose
desde los parlantes la ultima media hora. Me insulta. La nena me apunta con una cuchara de madera, culpandome de su
risa.
Es
demasiado.
Me cuesta entender en que lugar del limbo se encontraba ella para
conectarse en lo que duro el sonido de una carcajada, con
toda esa ira.
Me
siento como uno de esos tipos que fallan mostrando su talento por tv, esa gente
que lleva loros que cantan el himno nacional a la tv y justo ese dia el loro
era tan solo eso, un loro, como cualquier otro loro.
El
living huele a final, a tristeza. Mientras
en Holanda se celebra el dia de la reina, en Argentina es el dia del
animal, Gloria se encierra en el banio, Mia mira el techo, hace de cuenta que
no esta ahi, a escasos metros mios.
-
Mia… hoy es el dia del animal ¿Sabias?
-
Claro, le compramos a Pulgoso un palito para masticar.
-
Ah.. no sabia ( me dolio no saberlo, me senti ajeno)
-
Un palito rojo, pero ya se lo comio.
-
Mia..¿ si yo fuese un
animal cual seria?
-
El mas lindo
-
¿Y cual es el animal mas lindo?
-
Vos.