¿Te acordas cuando atravesaste la puerta de vidrio del restaurante japonés?. Ibamos al mejor lugar del centro, a vos te encantaba, yo vendia marihuana solo para satisfacer tus caprichos, comíamos como cerdos y despues ibamos al cine a ver películas europeas. No me soltabas la mano, y nunca me besabas con lengua.
Yo no estaba enamorado de vos, solamente te admiraba como a un animal extraño que adopte una noche. Eras fea, pero llevabas tu fealdad con una arrogancia aristocratica, eras una pobre desclasada que se llenaba el buche con sushi barato. Soñabas con conocer uno de esos viejos que maniatan a jovencitas a las que le eyaculan en sus rostros mientras fantasean con sus hijas, dueños de propiedades, gerentes, directores de museos. Alguien que compre tu dignidad a un precio que justifique cada uno de los días que no ibas a despertar a mi lado.
Atravesaste el vidrio casi sin notarlo , primero moriste de vergüenza, y despues de miedo, al verte cubierta de sangre. Te subi a un taxi y no te solte la mano hasta la ultima puntada que te dio el medico de guardia. Me mirabas fijo y temblabas como una gata a punto de perder su septima vida. Yo era un dealer de fin de semana, un musico fracasado, un idiota más en la sala de espera de algun judio adinerado que quiera esponsorear tu locura. No entendias muy bien eso que te pasaba en el estomago, cerca de la cicatriz que mas que un accidente, parecía la cesárea del hijo que nunca tuvimos.
En noches como esta, de luna apagada y silencio, me parece escuchar tu risa, que de a poco se vuelve llanto, ruego, lamento. Y si cierro los ojos te recuerdo hermosa como nadie te veía , joven, despierta. Pero cuando los abro, tu ausencia lleva el perfume del olvido, el amargo sabor del desencuentro, el sonido del paso del tiempo arrastrando sus pies hacia la nada.
Tuesday, June 30, 2020
Friday, June 19, 2020
Los labios pintados con sangre.
Hay violetas en el desierto,
crecen por las pequeñas gotas de rocío,
que viajan en las tormentas de arena.
Hay vida entre las piedras,
donde el sol nunca entra
ni la luz de la luna brilla.
Ahora hay flores
hasta ayer estaban en reposo,
hunde tus pies descalzos,
entregate al instinto del escorpión
y al perfume efimero de la vida.
crecen por las pequeñas gotas de rocío,
que viajan en las tormentas de arena.
Hay vida entre las piedras,
donde el sol nunca entra
ni la luz de la luna brilla.
Ahora hay flores
hasta ayer estaban en reposo,
hunde tus pies descalzos,
entregate al instinto del escorpión
y al perfume efimero de la vida.
Saturday, June 13, 2020
El ultimo febrero.
Una metáfora,
superstición en vez de religión.
Un paisaje detrás de la niebla,
que nos hacía distintos,
hoy nos encuentra en la memoria.
Todo lo negro se volvió blanco,
en el último Febrero.
Nos comportabamos como animales,
perdidos en calles civilizadas
vírgenes del desamor,
afectados por lo ordinario.
Nos preguntamos ahora,
adonde fueron todas las palabras,
que se perdieron como soles en el poniente.
Pensemos algo nuevo,
más allá de lo experimentado.
Extraño el último Febrero,
tu sombra y la mía,
todo lo blanco
se volvia negro.
hoy nos encuentra en la memoria.
Todo lo negro se volvió blanco,
en el último Febrero.
Nos comportabamos como animales,
perdidos en calles civilizadas
vírgenes del desamor,
afectados por lo ordinario.
Nos preguntamos ahora,
adonde fueron todas las palabras,
que se perdieron como soles en el poniente.
Pensemos algo nuevo,
más allá de lo experimentado.
Extraño el último Febrero,
tu sombra y la mía,
todo lo blanco
se volvia negro.
Thursday, June 4, 2020
Avanzabamos.
Le cortabamos el cuello a los días,
y por las noches nos mirabamos fijo con la luna.
Alzabamos los brazos al atardecer
en señal de victoria,
de rendición ante el goce.
El cielo era un agujero que habitabamos.
La muerte estaba en el sabor de las cosas,
y sin embargo,
avanzabamos.
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